Páginas AFICIONADOS TAURINOS SIN ANIMO DE LUCRO

sábado, 28 de septiembre de 2013

ALGEMESI SIN CABALLOS

El toreo de verdad conmueve las almas. Por eso también una novillada sin caballos puede resultar emocionante si en ella se produce el toreo de verdad. Es evidente que la importancia que un toro confiere a una faena es superior a la que se pueda producir en cualquier otro tipo de espectáculo menor. Pero, en su favor, las novilladas sin caballos tienen el aliciente de la apuesta. Los aficionados juegan a ser adivinos, a presagiar quién tiene condiciones para llegar a figura y quién no.
Difícil envite en este caso, porque tanto David Menes como Cristian Gómez hicieron las delicias de un público que casi llenó la plaza de Algemesí para disfrutar con sus actuaciones en el tercer y último festejo del concurso Naranja de Plata celebrado en esta ocasión en horario nocturno. Hubo toreo de verdad y pique. Pique en quites entre los dos anunciados y también el sobresaliente, Vicente Jiménez, que respondió con unas gaoneras de rodillas y con  faroles de la misma guisa a la aplastante variedad de Menes y al ajuste de Gómez. Fantástico.
Ayudaron a la fiesta tres novillos de El Parralejo, sobre todo segundo y tercero, bravos y con clase. Repetidor incansable y con alegría el segundo, en ese aire pero un punto más suave el tercero. Se dejó el cuarto, encastado pero más áspero, y resultó más deslucido el primero, con el hiero de Javier Molina.
Decía que será complicado vaticinar quién de los dos llegará más alto después de lo visto en Algemesí en la octava de feria. Ambos se merecerían lo mejor de continuar en el mismo son. David Menes cortó la oreja del que abría festejo, el más complicado de la noche, al que le robó dos interesantes tandas por el pitón izquierdo antes de que el animal se sintiera podido y de que se pusiera reservón.
Lo mejor de su actuación lo firmó ante el segundo de su lote. Inició su labor con una tanda completa de toreo en redondo de rodillas. En pie muleteó en redondo con ritmo y al natural con profundidad, incluso por momentos con sentimiento. No se le apreciaron dudas, al contrario, fue todo clarividencia, tranquilidad, seguridad, desparpajo y rotundidad. Disfrutó y gustó. Lástima que no estuviese tan acertado con el estoque.
También lo echó todo a perder con los aceros un mayestático y seguro Cristian Gómez, que llevó a cabo una primera labor de máxima ligazón y temple, redonda y rotunda, con momentos de desmayo y de pases muy largos. Bien con las dos manos a pesar de que el magnífico eral pedía el carné (y el chaval lo tenía).
Se fue a portagayola a recibir al último, y de rodillas esperando estuvo más de tres minutos, una eternidad. Con la muleta buscó de nuevo la ligazón, y la encontró a pesar de que ahora los pases surgieron menos limpios ante un ejemplar más protestón, quizá porque le obligo mucho llevándolo muy por abajo. Lo compensó con una entrega total y ciñéndose las embestidas al límite. En esta ocasión no se demoró tanto con el estoque y, además de empatar en emoción, igualó el marcador a una oreja con su compañero.
Ficha del festejo:
Viernes 27 de septiembre. 8ª de feria, nocturna. Tercer y último festejo del I Trofeo Naranja de Plata. Casi lleno. Un eral de Javier Molina (1º, deslucido) y tres de El Parralejo (2º y 3º muy buenos, 4º más protestón).
David Menes: oreja y saludos tras aviso.
Cristian Gómez: saludos tras dos avisos y oreja.

No hay comentarios:

Publicar un comentario