http://www.aplausos.es/noticia/24447/Noticias/Climent-y-Varea-a-oreja-por-coleta-ilusionan-en-Valencia.html.
Cristian Climent y Varea han cortado una oreja cada uno en la segunda y última novillada de la Feria de Julio. Valenciano y castellonense consiguieron los pasajes más lucidos de un festejo en el que Álvaro Lorenzo, aparatosamente volteado por el cuarto, malogró con la espada un notable esfuerzo, motivo por el que no llegó a tocar pelo. Alejandro Talavante debutó como ganadero en plaza de primera con un envío de desigual juego en el que destacó sobre todos un excelente ejemplar: el tercero.
El tercero fue un gran novillo. Derribó en el primer puyazo, en el que empujó con clase, y persiguió las telas descolgado y por abajo, con gran calidad en sus embestidas. Además, tuvo alegría, prontitud y duración, permitiendo hacer el toreo a Varea. El de Castellón, que ante el segundo dejó su tarjeta de visita en un quite por chicuelinas de compás abierto coronado con una buena media -a la postre lo mejor de esa primera intervención-, brindó al público una faena en la que quedó patente su buen concepto. Hubo temple, buen gusto y torería, tanto en el toreo fundamental como en los ayudados por bajo finales, cortando una oreja tras matar de pinchazo y estocada arriba.
Varea brindó al público la muerte del sexto, en el que dejó toreros detalles como un cambio de mano en el inicio de faena, una trincherilla a la conclusión de una serie o algún ayudado por bajo a la hora de buscar la cuadratura del animal. Entre medias, basó su labor por el lado zurdo -el único algo más potable del burel- en series en las que buscó bien el pitón contrario para provocar la embestida. Persiguió la conexión con el público hasta el final con una serie de molinetes en cadena. Mató de estocada y varios golpes de descabello y dio la vuelta al ruedo como respuesta a la petición de trofeo por parte del público.
Cristian Climent perdió premio con la espada tras hacer un esfuerzo ante el noble segundo. Lo recibió bien a la verónica, mostrándose después firme y seguro con la muleta en series por los dos pitones. Pisó el ruedo con convicción, dejando naturales sueltos de buena factura a pesar del inconveniente del viento. Finalizó entre pitones, buscando calentar los tendidos, pero pinchó tres veces arriba antes de agarrar la estocada definitiva.
Volvió a causar una grata impresión ante el quinto, un novillo muy manejable con el que Climent encandiló al público con su concepto de trazo largo y muleta rastrera. Se encajó con el noble animal, firme y asentado siempre, en una labor en la que fue cogido, afortunadamente sin consecuencias. Terminó por manoletinas, mató de estocada y cortó una oreja bien ganada. Antes, en su turno de quites en el cuarto, se la había jugado por gaoneras.
Álvaro Lorenzo estuvo templado y valiente ante su segundo, un novillo que embistió con genio y temperamento -y mejor cuando el torero no se quedó encima-. El manchego, con buen oficio, supo darle réplica en una labor decidida, firme y asentada de plantas. Sufrió una fea voltereta de la que se rehizo para seguir toreando sobre la mano zurda como si nada hubiera pasado. Hubo muletazos de buen trazo, pero emborronó todo con dos pinchazos previos a la estocada final y saludó la ovación del público.
Abrió plaza un bonito novillo colorado que protestó y se defendió sin clase en las telas. Álvaro Lorenzo, molestado por el viento, anduvo tesonero con el deslucido animal, intentándolo por los dos pitones en una faena larga y sin brillo rematada de estocada entera cobrada con facilidad y un golpe de descabello.
Valencia, 23 de julio de 2014. Tercera de feria. Novillos de Alejandro Talavante, bien presentados y de juego desigual. Destacó sobre todos el 3º, de excelente clase. Álvaro Lorenzo, silencio tras aviso y ovación con saludos tras aviso; Cristian Climent, silencio tras aviso y oreja tras aviso con leve petición de la segunda; y Varea, oreja tras aviso y vuelta al ruedo tras petición. Entrada: Casi un tercio. Saludaron tras banderillear al segundo José Manuel Montoliu y Miguel Ángel García.
Cristian Climent y Varea han cortado una oreja cada uno en la segunda y última novillada de la Feria de Julio. Valenciano y castellonense consiguieron los pasajes más lucidos de un festejo en el que Álvaro Lorenzo, aparatosamente volteado por el cuarto, malogró con la espada un notable esfuerzo, motivo por el que no llegó a tocar pelo. Alejandro Talavante debutó como ganadero en plaza de primera con un envío de desigual juego en el que destacó sobre todos un excelente ejemplar: el tercero.El tercero fue un gran novillo. Derribó en el primer puyazo, en el que empujó con clase, y persiguió las telas descolgado y por abajo, con gran calidad en sus embestidas. Además, tuvo alegría, prontitud y duración, permitiendo hacer el toreo a Varea. El de Castellón, que ante el segundo dejó su tarjeta de visita en un quite por chicuelinas de compás abierto coronado con una buena media -a la postre lo mejor de esa primera intervención-, brindó al público una faena en la que quedó patente su buen concepto. Hubo temple, buen gusto y torería, tanto en el toreo fundamental como en los ayudados por bajo finales, cortando una oreja tras matar de pinchazo y estocada arriba.
Varea brindó al público la muerte del sexto, en el que dejó toreros detalles como un cambio de mano en el inicio de faena, una trincherilla a la conclusión de una serie o algún ayudado por bajo a la hora de buscar la cuadratura del animal. Entre medias, basó su labor por el lado zurdo -el único algo más potable del burel- en series en las que buscó bien el pitón contrario para provocar la embestida. Persiguió la conexión con el público hasta el final con una serie de molinetes en cadena. Mató de estocada y varios golpes de descabello y dio la vuelta al ruedo como respuesta a la petición de trofeo por parte del público.
Cristian Climent perdió premio con la espada tras hacer un esfuerzo ante el noble segundo. Lo recibió bien a la verónica, mostrándose después firme y seguro con la muleta en series por los dos pitones. Pisó el ruedo con convicción, dejando naturales sueltos de buena factura a pesar del inconveniente del viento. Finalizó entre pitones, buscando calentar los tendidos, pero pinchó tres veces arriba antes de agarrar la estocada definitiva.
Volvió a causar una grata impresión ante el quinto, un novillo muy manejable con el que Climent encandiló al público con su concepto de trazo largo y muleta rastrera. Se encajó con el noble animal, firme y asentado siempre, en una labor en la que fue cogido, afortunadamente sin consecuencias. Terminó por manoletinas, mató de estocada y cortó una oreja bien ganada. Antes, en su turno de quites en el cuarto, se la había jugado por gaoneras.
Álvaro Lorenzo estuvo templado y valiente ante su segundo, un novillo que embistió con genio y temperamento -y mejor cuando el torero no se quedó encima-. El manchego, con buen oficio, supo darle réplica en una labor decidida, firme y asentada de plantas. Sufrió una fea voltereta de la que se rehizo para seguir toreando sobre la mano zurda como si nada hubiera pasado. Hubo muletazos de buen trazo, pero emborronó todo con dos pinchazos previos a la estocada final y saludó la ovación del público.
Abrió plaza un bonito novillo colorado que protestó y se defendió sin clase en las telas. Álvaro Lorenzo, molestado por el viento, anduvo tesonero con el deslucido animal, intentándolo por los dos pitones en una faena larga y sin brillo rematada de estocada entera cobrada con facilidad y un golpe de descabello.
Valencia, 23 de julio de 2014. Tercera de feria. Novillos de Alejandro Talavante, bien presentados y de juego desigual. Destacó sobre todos el 3º, de excelente clase. Álvaro Lorenzo, silencio tras aviso y ovación con saludos tras aviso; Cristian Climent, silencio tras aviso y oreja tras aviso con leve petición de la segunda; y Varea, oreja tras aviso y vuelta al ruedo tras petición. Entrada: Casi un tercio. Saludaron tras banderillear al segundo José Manuel Montoliu y Miguel Ángel García.
FUENTE APLAUSOS
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