México D.F (México). Federico Pizarro volvió a ofrecer una gran dimensión en La México. Dejó patente su madurez y su continuo progreso en dos faenas de mucho contenido y grandes pasajes. Logró cortar una oreja del que abrió plaza y dio una vuelta al ruedo tras pasaportar a su segundo, rozando así la Puerta Grande. Jerónimo y El Capea se fueron de vacío después de hacer lo posible y más con los de sus respectivos lotes. El encierro de Santa Bárbara ofreció un juego desigual, siendo los más potables el primero y segundo y el resto con escaso fondo que condicionó en gran medida las faenas.
Jerónimo realizó una buena faena al segundo de Santa Bárbara resultó una faena de más a menos en la que destacaron momentos pero a la que le faltó regularidad. Destacaron tandas sueltas y aunque cierto sector del público pidió el trofeo, el Juez de Plaza no lo concedió. Dio una vuelta al ruedo. Su segundo toro fue un toro más deslucido al que le faltó recorrido. Tuvo que perderle pasos para poder extraerle con esfuerzo muletazos que no redondeaban la faena. El toro tampoco tuvo escaso fondo y protestaba en ocasiones.
Federico Pizarro logró firmar una notable faena al primero de la tarde. El mexicano enlotó un toro de Santa Bárbara que tuvo mucha calidad y nobleza y supo pulsearlo con gusto y transmisión sobre todo en tandas de bello trazo y calidad por el pitón derecho. Aunque al toro le faltó algo de fondo, se empleó con temple en la muleta de Pizarro. Con el cuarto,Pizarro de nuevo se mostró templado y pulseó con gusto a un toro que tuvo la virtud de la nobleza y al que siempre alargó el muletazo y concediéndole los tiempos oportunos, haciendo que la faena tuviese mucha transmisión. Logró encandilar al público con su buen gusto y capacidad. Marró con los aceros lo que pudo ser otra faena de oreja.
El Capea firmó una faena voluntariosa al tercero, un toro que no terminó de romper y ante el que el salmantino se mostró firme y con mucho oficio. Resultó áspero por el pitón izquierdo y no hubo acople con el más complicado de Santa Bárbara hasta el momento. Destacó en el saludo de capa de rodillas y en un quite por chicuelinas. El segundo de su lote, aunque noble, tuvo muy poca fuerza desde su salida. El Capea tuvo que tirar de él en una faena tesonera en la que hubo de hacerle todo a media altura, puesto que en el momento en el que le bajaba la muleta para obligarle y que el trasteo fuese más intenso, el toro claudicaba. Destacó alguna tanda por el izquierdo y unos doblones con los que se adornó al final de faena y manoletinas.
El Capea firmó una faena voluntariosa al tercero, un toro que no terminó de romper y ante el que el salmantino se mostró firme y con mucho oficio. Resultó áspero por el pitón izquierdo y no hubo acople con el más complicado de Santa Bárbara hasta el momento. Destacó en el saludo de capa de rodillas y en un quite por chicuelinas. El segundo de su lote, aunque noble, tuvo muy poca fuerza desde su salida. El Capea tuvo que tirar de él en una faena tesonera en la que hubo de hacerle todo a media altura, puesto que en el momento en el que le bajaba la muleta para obligarle y que el trasteo fuese más intenso, el toro claudicaba. Destacó alguna tanda por el izquierdo y unos doblones con los que se adornó al final de faena y manoletinas.
Plaza de toros Monumental de México. Decimoséptima de la Temporada Grande. Unas 6.000 personas. Seis toros de Santa Bárbara, bien presentados y de juego desigual, flojos en líneas generales. Federico Pizarro, oreja y vuelta al ruedo; Jerónimo, vuelta al ruedo y palmas yPedro Gutiérrez El Capea, silencio y palmas. Incidencias: Cristhian Sánchez y Gustavo Campos saludaron tras banderillear al cuarto y al sexto, respectivamente. |
FUENTE MUNDOTORO
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