Madrid (España). Rubén Pinar tuvo que ser intervenido durante la pasada madrugada de urgencia. El segundo TAC que le realizaron señaló que el joven torero albaceteño tenía un 'hematoma intrapavenquimatoso', tras valoración de los neurocirujanos que posteriormente le intervinieron, Dr. Hernán Sandoval y Dra. Aída Antuña, se le practicó una 'cranestomía para evacuación del hematoma'. Santiago, mozo de espadas del torero, afirmó que la operación duró casi cuatro horas y que han sido momentos muy complicados: 'Tenía una arteria rota, por ello encontraron el segundo hematoma, entró gravísimo al quirófano, todo se complicó muchísimo. A las 00'30 fue cuando decidieron intervenirle en una operación que ha durado cuatro horas. Ha consistido en una unión de la arteria y absorver toda la sangre que tenía dentro del cerebro'.
'Ahora son horas críticas, -afirma Santiago-, debe estar al menos 48 horas en cuidados intensivos y estos momentos son decisivos porque ahora tienen miedo a que vuelva a ocurrir y de que por ejemplo no pierda el habla, que puede ser una de las secuelas. Pero los neurocirujanos, a los que estamos muy agradecidos porque están haciendo un gran trabajo, son optimistas porque no entró al quirófano con ningún daño neurológico, aunque claro, no lo aseguran del todo. Nosotros deseamos que no sea así, porque es un crío, esperemos que todo vaya bien a partir de ahora'.
El torero albaceteño resultó feamente volteado el pasado miércoles mientras mataba un toro a puerta cerrada en la ganadería de Nazario Ibáñez. Como consecuencia del fuerte golpe contra el suelo tras la caída, se le diagnosticó un traumatismo craneoencefálico que le ocasionó un primer coágulo.
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