García Márquez, víctima del cáncer, fue un gran aficionado a los toros. De hecho, realzó con su presencia en numerosas ocasiones distintos festejos taurinos de España, México y su Colombia natal. Recibió numerosos brindis de los toreros, pero quizá el más famoso fuese aquel que en Las Ventas de Madrid le dedicó José Miguel Arroyo "Joselito" en el San Isidro de 1996 momentos antes de cortarle las dos orejas a un toro de José Luis Marca. Aquella vez, precisamente, fue la última en que el maestro madrileño salió a hombros de la Monumental venteña.
La última tarde que pudo verse al ilustre escritor haciendo gala de su pasión por el toreo fue este pasado mes de febrero en la plaza de toros mexicana de Querétaro, donde asistió al mano a mano que enfrentó a El Juli con Joselito Adame, que le brindó la muerte de uno de sus toros.
La última tarde que pudo verse al ilustre escritor haciendo gala de su pasión por el toreo fue este pasado mes de febrero en la plaza de toros mexicana de Querétaro, donde asistió al mano a mano que enfrentó a El Juli con Joselito Adame, que le brindó la muerte de uno de sus toros.
Desde APLAUSOS expresamos nuestras más sentidas condolencias a los familiares y amigos del fallecido, a la vez que expresamos nuestra gratitud por la defensa que el finado siempre hizo del arte de la Tauromaquia.
FUENTE APLAUSOS
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