EXITO DE TALAVANTE EN CACERES

Alejandro Talavante ha sido el triunfador del segundo y último festejo de la Feria de San Fernando de Cáceres. El extremeño paseó una oreja de cada toro de su lote y salió a hombros por la puerta grande. Enrique Ponce se estrelló ante dos cuvillos sin opciones y Pablo Hermoso de Mendoza, que volvía al coso cacereño más de una década después de su última actuación, logró un trofeo del ejemplar que abrió plaza.
Alejandro Talavante cortó la oreja del tercero. Tuvo que poner todo el torero, que anduvo muy por encima de un ejemplar con pocas virtudes de Cuvillo. Lució en un vistoso quite con el capote el extremeño, que después mostró el momento dulce que atraviesa en una faena de muleta en la que los mejores momentos llegaron al natural. El astado aguantaba bien los dos primeros muletazos de cada serie, pero luego se afligía e impedía que Talavante redondeara del todo su labor. A pesar de ello, estuvo encajado, asentado, citando de frente y ofreciendo el pecho. Muy buena la imagen ofrecida. Mató de un buen espadazo entrando recto y convencido y paseó el trofeo a pesar de que el toro tardara en doblar.
El sexto fue un astado noble con el que Talavante toreó con cadencia, empaque y compás en una faena repleta de torería. Logró Alejandro imponer ritmo a una embestida que no la tenía. Hubo suavidad e inteligencia en la faena, en la que llegó a ralentizar la embestida del burel. Mató con facilidad y paseó un nuevo trofeo.
No tuvo suerte Enrique Ponce con el segundo, primero de los de Núñez del Cuvillo, un astado al que le faltó raza, clase y fondo. El valenciano, que brindó al público, intentó que el animal se viniera arriba pero no fue posible. Se justificó el de Chiva, que concluyó de media tendida y atravesada. El público premió la buena voluntad del torero con una ovación.
El feo quinto, de pelo jabonero, fue otro ejemplar deslucido de Cuvillo. Lo intentó todo Ponce, que buscó todos los resquicios tratando de lograr el lucimiento, pero el esfuerzo fue en balde. Le faltó toro al valenciano, que mató de media tendida y atravesada y fue ovacionado. Tarde sin opciones para el de Chiva.
Pablo Hermoso de Mendoza cortó la oreja del primero tras una templada y medida actuación. A lomos de Disparate trató de romper hacia adelante al de Luis Terrón, un toro con clase y bondad pero falto de brío y transmisión. Tuvo que suplir esas carencias el navarro, que con Viriato ganó bien la cara del animal y sobre Pirata clavó dos cortas realizando después el adorno del teléfono. Mató de un rejonazo desprendido y dos golpes de descabello.  Al término de su labor, con el toro ya muerto, saltó un antitaurino a los medios con un cartel que expresaba: "Stop tortura". Fue retirado por las fuerzas de seguridad entre el abucheo del público.
Poco pudo hacer Hermoso de Mendoza ante el cuarto, un astado de Luis Terrón agarrado piso, falto de casta y sin celo. Montó el navarro a Napoleón, Dalí, Duende y Pirata, pero la deslucida condición del toro impidió el lucimiento. Pinchó y fue ovacionado por su tesón.

Cáceres, 1 de junio de 2014. Feria de San Fernando. Toros de Luis Terrón, para rejones, y Núñez del Cuvillo, desiguales de presentación y de poco juego en conjunto. El rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza, oreja y ovación con saludos; Enrique Ponce, ovación con saludos en su lote; y Alejandro Talavante, oreja con petición de la segunda y oreja. Entrada: Lleno.
FUENTE APLAUSOS