Daniel Luque cortó dos orejas y un rabo al segundo de la tarde en la
plaza de toros mexicana de Guadalajara. El de Gerena cuajó a Tomano, que
así se llamaba el toro de San Isidro premiado con el arrastre lento, ya
desde el recibo capotero con verónicas con mucho gusto, cadencia y
cargando la suerte. Con la muleta le instrumentó una labor estética y
templada, salpicada de remates con mucha torería. Coronó la labor con un
soberbio estoconazo. Su segundo fue un toro sin transmisión con el que
Luque estuvo solvente, dejando detalles de su clase.
Una oreja
paseó Sergio Flores del tercero de la tarde. El mexicano salió a
revientacalderas tras el triunfo de Luque. Arreó y puso todo de su parte
en una labor de mérito que selló con una estocada por derecho de la que
salió herido tras recibir un pitonazo en la boca. Con el quinto, el
azteca fue aplaudido.
Fabian Barba tiró de vergüenza torera en
el cuarto de la tarde. Tras el triunfo de sus compañeros, recibió en el
centro del ruedo de rodillas al toro de San Isidro. Faena valerosa,
exponiéndo, por momentos tremendista. Falló con la espada y dio una
vuelta al ruedo. Antes, poco pudo hacer con un complicado astado que
abrió plaza. Regaló el séptimo de la tarde, con el hierro de Claudio
Huerta, que resultó deslucido y sin clase.
Guadalajara (México), domingo, 9 de noviembre de 2014. Toros de San Isidro y Claudio Huera (7º, como sobrero de regalo, deslucido). El segundo, premiado con el arrastre lento. Fabián Barba, ovación con saludos tras aviso, vuelta al ruedo y silencio; Daniel Luque, dos orejas y rabo y silencio; Sergio Flores, oreja con petición de la segunda y palmas. Entrada: Un tercio.
FUENTE APLAUSOS
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